CIFRAS ECONÓMICAS

La CEPAL, Comisión Económica para América Latina y el Caribe, es un organismo que depende de la ONU, la organización de naciones Unidas. Su finalidad es promover el desarrollo económico y social de la región.

En Julio de este año, la CEPAL entregó las siguientes cifras de crecimiento, para 2016 y proyección para 2017, respecto de los países de nuestro sector.

PAIS                                              2016                2017

Argentina	-1.8                 2.5
Bolivia (Estado Plurinacional de)	4.5                  4.3
Brasil	-3.4                 0.5
Chile	1.6                  2.0
Colombia	2.3                  3.2
Ecuador	-2.5                 0.2
Paraguay	4.0                  3.8
Perú	3.9                  4.0
Uruguay	0.6                  1.2
Venezuela (República Bolivariana de)	-8.0                -4.0

Es fácil ver que los únicos países a los que aventajamos son a los con serios problemas en sus gobiernos. En Brasil, sacan a su presidenta Dilma Rousseff por corrupción. En argentina, las acusaciones sobre la familia Kirchner llevaron a que Cristina Fernandez perdiera las últimas elecciones y su sucesor, Macri,  no ha dado el golpe de timón esperado. Venezuela para que decir.  El manejo déspota y populista sin ninguna visión de economía lo tienen al borde del caos.

El caso de Ecuador es quizás algo distinto. A pesar de seguir políticas socialistas, bolivaristas y antiimperialistas como Venezuela, el presidente Rafael correa había mantenido el crecimiento en su país hasta el terremoto de marzo de este año. Desde entonces el país decrece también al igual que su popularidad.

Y luego viene chilito. Con apenas un 1,6 de crecimiento para este año. Rebasados olímpicamente por nuestros vecinos Perú (3,9) y Bolivia (4,5), además de Paraguay (4.0) y Colombia (2.3).

 Por muchos años, Chile fue el ejemplo a seguir en materias de economía. Y siempre nos manteníamos con cifras de crecimiento por sobre nuestros vecinos. ¿Qué nos pasó?

El país ya está sacando sus propias conclusiones. El apoyo a la mandataria se mantiene alrededor del 23 %, uno de los más bajos de la historia. Buenas intenciones, malas ejecuciones. Mezcla de idealismo y tozudez. Súmele algo de corrupción y apego desmesurado al poder.

Lo peor de todo es que para el próximo año, aunque la cosa se ve levemente mejor, no se ve un despegue que nos sitúe en el lugar que acostumbrábamos. Sólo un gran golpe de timón en la administración económica del país, podrá lograrlo. Y para eso deberemos esperar un poco más, hasta el 2018. Esperemos que en ese momento así sea. Por el bien de todos.