PROACTIVIDAD MUNDIAL

Se denomina Proactividad a la actividad destinada a estudiar y poner en marcha planes destinados a anticiparse a las necesidades futuras, sometiendo constantemente a estos planes a un análisis crítico riguroso, de modo que permitan abortar cuanto antes aquellas acciones emprendidas que se demuestren que no llevan a ninguna parte.

Nuestra mandataria, hace unos dias atras, en un llamado público de atención a su gabinete, les pidió a estos ser más preactivos, anticiparse a los hechos y no esperar las crisis para buscar soluciones. Esto, en medio de la mayor protesta estudiantil de los últimos años. Este no fue el único hecho en el que se demostraba falta de proactividad del gobierno. Se necesitaron campañas televisivas y de prensa, algunos intentos de linchamiento y hasta una protesta en plaza Italia para que se comenzara a tomar en serio el problema delictual, que durante todo el gobierno anterior se estuvo achacando a una exageración de los medios de comunicación. Con los problemas de vivienda está pasando lo mismo. La lista suma y sigue y es probable que a futuro no sigamos encontrando con estos ejemplos, en este y en futuros gobiernos. Pero la falta de proactividad no está restringida a la clase política. Es un mal general. Un ataque Israelí en la ciudad de Qana, dejó un horroroso saldo de 34 niños muertos. Hizbula promete venganza, lo que significa que morirán más inocentes, esta vez del lado israelí. La comunidad internacional está conmocionada y pide a Israel un alto al fuego sin condiciones. Pero ahora es tarde. La guerra ya ha comenzado. Los muertos ya están muertos. Y no fue un ataque sorpresa. Los problemas entre Judios y Arabes data de cientos de años y por otro lado, las acciones violentas de Hizbula vienen dándose hace bastante tiempo ya. Siempre respaldada por algún motivo histórico que según ellos los justifica. Pero todos sabemos que la violencia engendra violencia y aunque esta vez, como muchas veces ha pasado, la reacción es mucho mas fuerte que la acción que la produjo, esta guerra se veía venir. Sin embargo, nuestra falta de proactividad y la de todo el mundo no nos permitió movilizarnos en ese momento como nos estamos movilizando ahora para terminar con la masacre. De habernos anticipado a los hechos, de haber sido preactivos, quizás muchas de estas muertes se habrían evitado. He buscado la explicación a esta falta de anticipación que se repite como una constante y la única respuesta que encuentro es nuestro egoismo. Ocurre que mientras los hechos no nos atañen, no vemos la necesidad de sacrificarnos ni de perder tiempo en ello. ¿Pero y por que la reacción posterior?. Simplemente llega el momento de quedar bien con nosotros mismos y con los demás. Tomamos parte por el más débil y eso nos deja relativamente tranquilos ante esta lejana masacre. Pasa con la gente común, pasa con los medios de comunicación y con los políticos también. Entonces vemos que la falta de proactividad pasa a ser un mal de la humanidad y no solo de un grupo en especial. Finalmente pienso que este post no es más que una reacción ante los terribles hechos observados y al igual que los demás, no tiene nada de proactivo.

¿POR QUE OPINO?

A veces al leer el diario, ver las noticias por TV o escucharlas en la radio, entre tantas imágenes y sonidos que nos llegan por estos medios diariamente, trayendo una variedad de contenidos que nos alejan un poco de la realidad, corremos el riesgo de recibir las noticias como parte del show de los medios olvidándonos que estas en realidad son parte de la vida misma. Quizás rabiamos un momento con la riñas entre políticos, gozamos con los líos de la farándula, nos asustamos con las noticias sobre la delincuencia o nos impresionamos con los efectos de la guerra o de los fenómenos naturales en el mundo. Pero después de cerrar el diario, apagar la televisión o el radiorreceptor, volvemos a nuestra cotidianeidad. Algunas noticias las seguimos en el tiempo si la prensa las sigue y nos las muestra. Pero en general una noticia muere después de verla o como gran cosa sobrevive hasta comentarla con algún contertulio. Sin embargo las noticias siguen viviendo. Es muy raro que el contenido de una noticia sea un hecho puntual, sin historia y sin futuro. Todo hecho noticioso tiene sus causas y sus efectos y creo que nuestro deber como parte de la sociedad, es enterarnos de ambos. Claro que es muy difícil hacerlo sin la ayuda de la prensa. De todas maneras se requiere un pequeño esfuerzo nuestro.
- Hacer un seguimiento de las noticias en distintos medios. (Lo mas distintos posible).
- Hacer el intento de relacionar aquellas noticias que parecen aisladas pero que tienen una relación a veces un poco oculta.
- Y finalmente, comentar las noticias y nuestras conclusiones sobre ellas, con la mayor cantidad de personas que sea posible, recibiendo a la vez de ellas sus comentarios.
En lugar de comentar la última pelea de la farándula, el resultado del fútbol o la serie de moda en televisión, comentemos las verdaderas noticias, esas que influyen en nuestro futuro como sociedad. De esta forma creceremos. Y cuando crecen los individuos de una sociedad. Ésta de seguro crece también y entonces veremos como nuestro pequeño esfuerzo habrá valido la pena.