Vaticinios

                                                                         

En los últimos siglos del primer milenio, los bárbaros invadieron Europa causando la agonía de la civilización. Muchos pueblos esperaban para el año 1000 la segunda venida de Cristo a la tierra y con ello la salvación del mundo occidental. Otros de frentón vaticinaban el fin del mundo para ese año. Uno de estos pueblos fueron los Francos, quienes gracias al corto reinado de Carlomagno, a pesar de todos los malos augurios, volvió a renacer la cultura en occidente. Y pasó el año 1000 y nada ocurrió. Para el 1900, la llegada del cometa Halley, trajo nuevos trágicos vaticinios. El cometa no nos impactaría, pero su enorme cola, llena de gases venenosos, pasaría sobre la tierra devastando toda forma de vida. Hubo gente que prefirió morir antes. Afortunadamente en Chile, con los escasos medios de comunicación de esa época, el pánico no alcanzó a cundir. El cometa pasó y nada ocurrió. El 2000 sería el nuevo fin del mundo. Por lo menos para todos los artefactos electrónicos. El Famoso Y2K, alarmó con un posible caos en las ciudades. Los computadores se volverían locos haciendo colapsar todo el sistema de vida como lo conocemos. Nuevamente nada ocurrió.

 Los testigos de Jehová también pronosticaron su fin del mundo. Russel pronostico la venida de Cristo para el 1874. En vista de que no ocurrió nada, lo postergaron para el 1914 y luego para el 1918. Como algunos de los dirigentes comenzaron a retirarse del culto debido a tanta profecía fallida, el fin del mundo fue nuevamente prefijado para la década del cuarenta, en que obviamente tampoco nada ocurrió. Nuevos cálculos publicados en la Atalaya lo tienen postergado para el 2034, ya veremos.  

   Este año son los Mayas los que nos tienen amenazados para con desastres en Diciembre. Como es de esperar, nuevamente no ocurrirá nada. Como ha sido con alineamiento de planetas, tormentas solares, cometas, asteroides y cuanta amenaza estelar no ha podido afectar. Está claro que el fin del mundo llegará algún día, pero les aseguro que no será vaticinado por nada ni nadie.

 Y a propósito de vaticinios, en estos días pasé frente al nuevo mall, el Costanera Center. Recordé los vaticinios que anunciaron un inminente caos vial con su apertura. Atochamientos de gente y de automóviles que no se podrían controlar. Pues personalmente no vi nada de aquello. Tajamar aparecía casi vacía con tres pistas disponibles en lugar de dos como antes. Vitacura, mucho más ordenada con nuevas pistas de viraje. Desde Andrés Bello el acceso expedito por una ancha calle que pasa  junto al Mall. Por un paso peatonal elevado, la gente se trasladaba hacia el metro Tobalaba sin tener que cruzar calle alguna. Claro que no era horario Peak, pensé. Decidí volver a las 19:00 horas para comprobar lo que deducía. O sorpresa, el atochamiento no era más ni menos que hace un año atrás. Un nuevo vaticinio había fallado.

Por ahora, el caos de ese sector aparece postergado hasta la inauguración de la torre de oficinas del complejo. Yo personalmente, creo que ya sé que esperar de aquel acontecimiento.